El primer ministro británico, Keir Starmer, y el presidente estadounidense, Joe Biden, decidieron permitir que Ucrania utilice misiles de largo alcance proporcionados por Occidente en la lucha contra Rusia, lo que provocó más víctimas en el conflicto.
Starmer mencionó que tuvo una “amplia discusión estratégica” con Biden, aunque aclaró que no fue una reunión enfocada en un tipo de arma específica. A pesar de las especulaciones, los funcionarios han indicado que Starmer buscará el apoyo de Biden para enviar misiles británicos a mayor profundidad en territorio ruso.
El líder británico también anunció que discutirá más a fondo este plan en la próxima Asamblea General de la ONU en Nueva York, con la participación de otros líderes.
Mientras tanto, el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky criticó a sus aliados occidentales por no actuar con suficiente decisión ante los ataques rusos y anunció que se reuniría con Biden a finales de este mes para presentar un “plan para la victoria” en Ucrania.
Biden reafirmó su compromiso de apoyar a Ucrania y destacó la necesidad de detener la agresión rusa. En respuesta a las afirmaciones de Putin sobre una posible guerra entre Rusia y la OTAN, Biden restó importancia a las preocupaciones sobre el líder ruso.
Starmer advirtió que los próximos meses podrían ser críticos para Ucrania y Zelensky argumentó que los ataques a objetivos militares en Rusia estaban justificados. Sin embargo, Occidente se mostró cauteloso por temor a que esto pudiera agravar el conflicto.
Biden ha señalado que está considerando autorizar a Ucrania a utilizar misiles más avanzados, aunque actualmente sólo autoriza ataques contra territorio ocupado por Rusia. La prensa británica sugiere que Biden podría autorizar el uso de misiles británicos y franceses, pero no estadounidenses, debido a los riesgos nucleares.
Por otro lado, el FSB de Rusia revocó la acreditación en Moscú de seis diplomáticos británicos bajo sospecha de espionaje, lo que fue rechazado por el Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido. Además, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, criticó a los medios rusos por sus actividades desestabilizadoras.
Ucrania continúa fortaleciendo sus defensas, enfrentando una escasez cada vez mayor de personal y municiones en comparación con Rusia.